jueves, enero 10, 2013

¿BUENA NOTICIA?

Les voy a decir una cosa: ayer, mientras el común de los mortales aplaudía hasta con las orejas la apertura de una ventana de financiación para las empresas españolas que era aprovechada por estas de manera intensiva, con plazos y diferenciales impensables hace apenas un par de meses, y servidor se entretenía en el bombardeo a sus competencias a la que ha sido sometido el Ministro de Industria, el INE publicaba una estadística mucho más relevante para el conjunto de nuestra economía, a saber: las cuentas no financieras del país correspondientes al tercer trimestre del año 2012. Pese a su poco atractivo a priori, les aseguro que su contenido supera con creces la vulgaridad del continente. Por muchos motivos, vaya que sí.

Resumámoslo en un titular:

España generó en el periodo julio-septiembre de 2012 capacidad de financiación equivalente al 1,3% del PIB trimestral, algo que no ocurría desde el mismo periodo del año 1998.

Es decir, tras 14 años de dependencia del dinero foráneo para costear la actividad económica interna, España le ha conseguido dar la vuelta a la tortilla. De hecho, los 3.243 millones de ‘superávit’ contrastan con los 6.000 de ‘déficit’ un año antes, un giro superior a los 9.000 millones de euros. En términos anuales, aun manteniéndose la necesidad de financiación, esta se ha reducido al 1,8% del PIB anual (19.479 millones de euros), una contracción sustancial respecto al 3,1% de septiembre de 2011 y los entornos superiores al 10% de 2007 y 2008. Great news.

Una extraordinaria noticia, pero… ¿a qué coste?

Seguid leyendo.