jueves, febrero 23, 2012

JOSÉ MARÍA RIDAO, nada menos que en El País, nota que los mismos que criticaban la 'conspiranoia' sobre el 11-M son los que ahora están dispuestos a afirmar que la sentencia contra Garzón es una conspiración gigante para acallar al juez. Considera que los argumentos jurídicos han quedado "escamoteados a la opinión pública, bajo el pretexto de que son difíciles de explicar."

Pues no sé, José María, yo diría que explicados lo han estado de sobras, sólo que se resistían a aceptar unos argumentos que están más que claros...