lunes, agosto 15, 2011

BRAVO por John Carlin, que escribe hoy esto en El País:
Los progres que se preparan para manifestarse contra el Papa en Madrid esta semana gritarán todo tipo de consignas -"De mis impuestos al Papa cero" y tal-, pero en el fondo lo que les motiva es un rechazo visceral ("Fuck off, Rat-zinger!") a la Iglesia. Porque en España uno difícilmente puede ser progre si no es anticatólico. La gente vive presa del pasado, incapaz de liberarse del trauma religioso del franquismo, encadenada emocionalmente a la Iglesia in saecula saeculorum. ¡Qué aburrimiento! ¡Libérense ya! Pasen del papismo de una santa vez. Que los jóvenes católicos vayan a orar con su pontífice en paz, que entre ellos, como en todo el mundo, hay gente buena y gente mala.

Y si me equivoco, y si la base de todo el alboroto que se va armar alrededor de la visita del Papa es puramente racional, pues seamos consecuentes. Abandonemos aquella ortodoxia progre que reza que hay que ser respetuosos y tolerantes con el islam. Juzguemos a todos los musulmanes también por sus ayatolás, Rouco, o sus terroristas suicidas, que no hace mucho mataron (con perdón de El Mundo) a 191 personas en Madrid. Y, ya que estamos, vayamos a manifestarnos contra aquellos grandes defensores de la ley sharía, la familia real saudí, que debe de estar de vacaciones por Málaga en estas fechas. ¿Alguien se anima?