martes, julio 27, 2010

SERÁ MEJOR que esto no lo lea Zapatero: varios estados del oeste de EEUU, como Utah, Colorado y Washington, han empezado a prohibir que la gente recoja el agua de lluvia que cae en sus propias casas o empresas porque no es de su propiedad. Teniendo que todas las chorradas que tanto gustan a las fuerzas de progreso europeas han empezado curiosamente en el país que más odian (de ahí vienen cruzadas antitabaco, lenguajes políticamente correctos, animalismos, y más), no tardaremos en ver cómo algún borracho de estatismo propone lo mismo aquí.