martes, abril 03, 2007

"FARSALONA", escribe Màrius Serra (requiere suscripción):
Yo no sabría vivir en otro lugar, pero la Barcelona de estos últimos años se parece demasiado a una de esas estatuas humanas que se buscan la vida en la Rambla. Quietas, sin mover ni una pestaña, maquilladas y emperifolladas al máximo, cuidando al máximo su apariencia para que los miles de transeúntes venidos de todas las partes del mundo las admiren. Aguantan pacientes que las masas las rodeen, las fotografíen, las filmen, incluso que las vituperen, con tal de que al final aflojen la mosca. Sólo cuando oyen el sonido de las monedas en su platillo despiertan y menean el trasero.
Ay.

ACTUALIZACIÓN. Había olvidado el enlace; añadido está.