martes, febrero 13, 2007

YA ES OFICIAL:

North Korea has agreed to shut down its main nuclear reactor within 60 days and eventually dismantle its atomic weapons programme.



Under the deal at talks with the US and four regional powers, the North will receive an initial 50,000 tonnes worth of aid in heavy fuel oil for shutting down and sealing its main nuclear reactor, to be confirmed by international inspectors, Chinese envoy Wu Dawei said.



The North will eventually receive another 950,000 tonnes in aid for irreversibly disabling the reactor.



If Pyongyang goes through with its promises, they will be the first moves the communist nation has made to scale back its atomic development after more that three years of six-nation negotiations marked by delays, deadlock and the North's first nuclear test explosion in October.

Por supuesto esta es la clave: "si Pyongyang cumple sus promesas", al fin y al cabo ya engañaron a Carter cuando fue el enviado especial de la administración Clinton. Pero por lo menos es un primer paso, y además la administración Bush ya demostró con Libia que sabía cómo hacer que el desarme no quedara en papel mojado.



Venga, ahora a repetir todos conmigo: "Bush ha hecho el mundo mucho más inseguro". Será para quienes quieran que los peores tiranos del planeta tengan armas nucleares, claro. Desde hace tiempo tenemos uno menos -Libia- y, por lo que parece por esta noticia, ya ha caído el segundo. Ambos, y muy especialmente el primer caso, es consecuencia directa de la guerra de Iraq, igual que lo fue el desmantelamiento del chiringuito atómico del científico pakistaní AQ Khan. Vale, en la guerra de Iraq ha habido muchas cosas que no han salido bien, pero cualquier crítica honesta debería tener en cuenta también los factores positivos.



Y del mismo modo, todas aquellas voces que están constantemente pidiendo que los que defendieron la guerra "se disculpen por los errores" deberían también por su parte reconocer que se equivocaron ellos mismos en muchas cosas que ahora, convenientemente, no recuerdan: millones de refugiados, hambrunas, guerras nucleares, la calle árabe en ebullición. Ninguna de esas profesías se ha producido ni de lejos, y llama la atención lo tranquila que ha estado la opinión pública de los países de la zona (no me refiero a encuestas, que las carga el diablo, sino a personas saliendo a la calle a manifestarse, que han sido cuatro gatos incluso en los países en que cuando los 'jefes' la convocan, es casi obligado acudir a una manifestación).