jueves, mayo 11, 2006

PARA SER UN PAÍS cuyo militarismo deja en la cuneta a los necesitados, los EEUU tienen ciertamente una distribución muy curiosa del gasto público:
In 1954 defense accounted for 69.5 percent of federal spending and "human resources" (programs such as Social Security, Medicare, job training and food stamps) only 18.5 percent. In 2005 defense was 20 percent and human resources 64.2 percent.
Leer el resto del artículo de Robert Samuelson, que no deja en muy buen lugar a Galbraith, el santón de la economía políticamente correcta recientemente fallecido. Pero es que la realidad, ay, es muy tozuda.