domingo, febrero 12, 2006

PILAR RAHOLA:
Sumemos problemas. Por un lado estamos aplicando una autocensura brutal -resumida brillantemente en la portada satírica de El Jueves: "Estamos cagaos"- que ya ha modificado seriamente nuestra libertad.

Hoy, ¿nos atrevemos a decir todo lo que diríamos ayer? ¿No tenemos más miedo?

Por el otro, algunos dirigentes, como Rodríguez Zapatero, lejos de asumir el reto de la libertad, conectan con la mejor tradición asustadiza de Europa, cuyo máximo exponente debió de ser sir Neville Chamberlain, y piden perdón sin pedirlo, pero pidiéndolo un poquito.

Con ello consolidan lo que nunca tendríamos que aceptar: que el interlocutor del mundo islámico no sea la voz crítica, democrática y pacífica del islam, sino la voz ruda, violenta y fanática del integrismo.

¿A quién pide perdón ZP? ¿A Salman Rushdie? ¿A la diputada somalí holandesa condenada a muerte por ser colaboradora de Teo Van Gogh?

¿A las mujeres que sufren la misoginia fundamentalista? ¿O pide perdón al Irán del enloquecido Ahmadinejad?

En ese caso, no hace falta preguntarse quién está ganando.
(Lo siento pero, como no he encontrado el enlace original y por algún motivo no consigo pasar de la página inicial de la web de Pilar, pongo el link al texto completo que Jordi pegó aquí en comentarios)