viernes, agosto 19, 2005

I JUST CALL... to saaaaay, your son is dead:
Eugenio Abreu expresó ayer su malestar por la forma «poco humana» en que recibió las noticias de la muerte de su hijo. «Fue por teléfono, y menos mal que estábamos cuatro personas en la casa, que nos consolamos mutuamente, ¿pero que habría pasado si se tratase de una persona mayor que pudiera sufrir un síncope?».

[...] El proceso de comunicar las muertes a los familiares ha sido tan penoso que en uno de los casos los encargados de Defensa tuvieron que recurrir a un mensaje en el contestador. Así llegó la noticia al domicilio familiar del soldado ribeirense José Ángel Martínez Parada, de 21 años.
Qué estilo.