martes, julio 26, 2005

EL ASESINO de Theo van Gogh acaba de conocer su sentencia hace unos minutos: cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

Pieter Dorsman, que ha estado siguiendo el tema de forma exhaustiva, reflexiona a propósito de la decisión judicial y sobre quién era y qué representaba la digura del director de cine holandés, asesinado por un fanático islamofascista.