sábado, junio 11, 2005

EXTRAORDINARIO, por tratarse de un torpedo bajo la línea de flotación del transatlántico Papanatas, este artículo de Michael Cook sobre la descerebrada acusación contra el Papa y la Iglesia Católica por su supuesta responsabilidad en la propagación de la epidemia del SIDA.

Y conste que escribo esto como ateo irredento.

(via Toni Mascaró).