jueves, febrero 24, 2005

YA SABÉIS, y lo he dicho en muchas ocasiones, que incluso cuando no estoy de acuerdo con Íñigo Sáenz de Ugarte (periodista de Tele 5 y autor del blog Guerra Eterna en Oriente Medio) respeto su indudable profesionalidad. Además, a diferencia de la mayoría de sus colegas de empresa y de sector, sus opiniones están razonadas y no son una mera emisión, más o menos ordenada, de tópicos precocinados.

Precisamente por eso, leer este comentario suyo en Periodistas21 me ha dejado con la estructura mental completamente descangayada:
El PSOE no quiere volver a estar en la soledad televisiva en la que se encontró durante las dos legislaturas con Gobierno del PP. No creo que Zapatero olvide (los políticos nunca olvidan, los votantes sí) la cobertura que Telecinco hizo de su primera comparecencia en primera línea de fuego parlamentaria: su primer debate del estado de la nación frente a Aznar (el discurso del Quijote, por así decirlo).
(las negritas son mías)

Tranquilo, Íñigo, no creo que Zapatero tampoco olvide en su vida (¿cómo podría?) todo lo que vino a continuación: chapapote, Irak, Bush, Israel, lo que fuera. La verdad es que personalmente no recuerdo esa cobertura al primer debate del estado de la nación, pero si Tele 5 metió la pata entonces, luego le compensó con creces. De todo eso es imposible que Zapatero se olvide.