jueves, febrero 17, 2005

XAVIER SALA-I-MARTÍN:
No deja de ser curioso que, para secuestrar a Europa, el promiscuo Zeus tomara la forma de un toro. Digo que es curioso porque el toro es el símbolo de España. Y es España la que intenta ahora secuestrar a Europa para, nos dice el presidente Rodríguez Zapatero, "actualizar la ambición de nuestro proyecto nacional". Un proyecto nacional que todo patriota debería favorecer si no quiere ser catalogado por el ministro José Montilla de extremista equiparable a Le Pen. Pues yo, o no debo de ser patriota o debo de ser un extremista, porque no voy a votar a favor de la Constitución.
Tampoco va a votar en contra -y es una lástima- porque no cree que la constitución europea sea tan mala como para merecerlo. Yo sí lo creo, y por eso mi voto va a ser negativo; es mi única discrepancia con un artículo que aún así vale la pena leer.