sábado, junio 19, 2004

VACLAV HAVEL afirma en un artículo en la edición de hoy del Washington Post que ha llegado el momento de tomar medidas en contra de Corea del Norte. Antes de que salga alguien diciendo ¡eso¡ ¿por qué fue Iraq y no Corea del Norte? ¿acaso es porque en Corea del Norte no hay petróleo?, mejor que lo piense dos veces: Vaclav Havel fue uno de los más firmes defensores de la coalición que derrocó a Saddam mediante la guerra de las cuatro íes. Así que él sí tiene legitimidad moral para decir lo que dice.

No está propugnando una acción militar, por lo menos de momento, sino un esfuerzo serio y concertado de todos los países democráticos, esfuerzo necesario especialmente por la pasividad -que casi calificaría de criminal- de las Naciones Unidas. Nada sorprendente: es la misma pasividad con la que está afrontando el genocidio en la región sudanesa de Darfur, y que le lleva incluso a rechazar etiquetar como tal el asesinato de centenares de miles de personas en los últimos meses para no tener que involucrarse a fondo yendo más allá de la retórica hueca y promoviendo un acción militar si fuera necesario para detener lo que Human Rights Watch llama limpieza étnica. Algo que los EEUU y el Reino Unido deberían empezar a considerar en serio, ¡y eso que no hay petróleo!